Salud laboral: cómo cumplir con la legislación y afrontar sus retos actuales

La salud laboral siempre ha sido una preocupación tanto de las empresas como de los legisladores. Pero ha sido sobre todo a raíz de la crisis sanitaria del Covid-19 que este concepto ha alcanzado una gran relevancia. Y está hoy en el centro de los muchos debates que ocupan al área de Recursos Humanos. 

De hecho, a raíz de la pandemia, el concepto de salud laboral ha alcanzado un gran relieve. Convirtiéndose para muchos especialistas y directivos en Recursos Humanos en una de las prioridades a trabajar. Y una de las grandes necesidades que articularán buena parte de los enfoques de Recursos Humanos en los próximos años. 

En este artículo te mostramos todo lo que dice la ley sobre este concepto, así como las nuevas tendencias derivadas de la salud laboral.  

• 1. ¿Qué es la salud laboral y cuáles son sus dimensiones?
• 2. La salud laboral y la ley
• 3. Cómo ajustarse a la ley: un Plan de Prevención
• 3.1. La evaluación de riesgos
• 3.2. Planificación de actividades preventivas
• 3.3.La información y la formación al empleado
• 3.4. Modificar el Plan de Prevención según las necesidades
• 4.Nuevas prioridades de la salud laboral: el bienestar psicológico y mental 
• 5. Desconexión digital y salud laboral 
• 6. Salud laboral y duración de jornada
• 7. Salud laboral y employer branding: una tendencia consolidada

¿Qué es la salud laboral y cuáles son sus dimensiones? 

Podemos definir el concepto de salud laboral (también “salud ocupacional”) como los procedimientos encaminados a asegurar y mejorar la salud de los trabajadores. Algo que, según la OMS, ha de ser realizado especialmente a través de la reducción de riesgos.  

En este sentido, cabe reconocer que los riesgos en un ambiente laboral pueden ser de muchos tipos. Es, por tanto, necesario hacer distinciones entre cómo el desempeño del trabajo puede impactar a la salud. Encontraríamos las siguientes dimensiones de la salud laboral: 

• –Seguridad: Muy relacionada con los accidentes laborales, especialmente los derivados de las lesiones producidas por máquinas, herramientas y cualquier otro utensilio laboral. 
• –Higiene Industrial: En el sector industrial puede ser habitual que los trabajadores estén en contacto permanente con sustancias perjudiciales para la salud. En algunos casos la exposición continuada y prolongada durante años puede suscitar la aparición de patologías y enfermedades. 
• –Ergonomía: Vinculada con la manera en que el desempeño del trabajo y de las tareas pueden afectar a la salud. Abarca un abanico muy amplio y puede ir desde los efectos de estar sentado de manera prolongada a los dolores crónicos derivados de un trabajo repetitivo o que requiere del empleo intensivo de una parte determinada del cuerpo. 
• –Riesgos psicosociales: Relacionados con el estrés laboral, el burnout o el mobbing. 
• –Medicina del Trabajo: Se trata de una dimensión curativa y restaurativa, dado que se ocupa de las acciones a realizar una vez que el daño a la salud se ha producida. 

El andamiaje legal que regula las cuestiones de la salud laboral en España es amplio y está constituido por dos leyes, dos Reales Decretos y una Ordenanza General. Entramos en esta cuestión a continuación. 

La salud laboral y la ley 

La legislación relacionada con la salud ocupacional en España está articulada por los siguientes textos legales: 

• –Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales 
• –Real Decreto 39/1997 sobre el Reglamento de los Servicios de Prevención 
• –Ley 14/1986 General de Sanidad 
• –Ordenanza General de Seguridad e Higiene en el Trabajo 
• –Real Decreto Legislativo 5/2000 por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social. 

Cómo ajustarse a la ley: un Plan de Prevención  

El Ministerio ha elaborado una Resumen sobre la Ley de Prevención de Riesgos laborales, en los que se presenta la información de manera gráfica y didáctica. Y también todos los pasos que hay que seguir para ajustarse a lo dispuesto por la ley. A grandes rasgos, estos son los pasos que ha de contemplar un plan de prevención: 

La evaluación de riesgos 

Es el primer paso. Y el más lógico: detectar cuáles son las potenciales amenazas para la salud de nuestros trabajadores. Ello se puede determinar echando mano los siguientes criterios: 

• -La actividad de la empresa 
• -Los puestos de trabajo 
• -Los trabajadores 
• -Equipos de trabajo 
• -Sustancias químicas 
• -Agentes biológicos 
• -Lugares de trabajo 

Planificación de actividades preventivas 

Una vez detectados los riesgos, hay que diseñar las acciones que vamos a llevar a cabo en nuestra empresa para evitarlos. De este modo, conviene tener en cuenta lo siguiente: 

• -Actividades a realizar 
• -Plazo para llevarla a cabo (fecha de inicio y fecha de finalización). 
• -Designación de responsables que la realizarán 
• -Determinar los recursos humanos y materiales para ejecutarla 
• -Realizar un seguimiento 

Cada empresa tiene sus circunstancias, por lo que el diseño dependerá fuertemente de su actividad y particularidades. Asimismo, existen actividades preventivas que suelen ser comunes en una empresa. Por ejemplo, un plan de evacuación, emergencias y primeros auxilios. 

La información y la formación al empleado 

Es un hecho que la empresa no puede estar continuamente pendiente de todo lo que se produce en un espacio de trabajo. Es por ello esencial el establecer un plan de comunicación interna, que informe y forme sobre la prevención de riesgos laborales. 

Modificar el Plan de Prevención según las necesidades 

Resulta también innegable que las empresas se transforman. Y con ellas sus circunstancias y, por tanto, sus riesgos. Razón por la que es imprescindible realizar un seguimiento de nuestro Plan de Prevención y actualizarlo siempre que sea necesario. Por ejemplo, cuando se produzcan las condiciones del trabajo. O cuando se produzcan daños a los trabajadores. Lo conveniente es siempre optar por la primera, dado que es preventiva, mientras que la segunda opción es reactiva. 

Nuevas prioridades de la salud laboral: el bienestar psicológico y mental 

Como apuntábamos al principio, la salud laboral ha cobrado una relevancia crucial a raíz de la pandemia. Es, de hecho, una de las tendencias actuales en lo referente a la salud laboral. De hecho, Inspección de Trabajo ha puesto énfasis en la salud mental con su reciente Criterio Técnico 104/2021 sobre la actuación frente a riesgos psicosociales. 

Por tanto, las empresas han de tener en cuenta los elementos psicosociales, así como garantizar la protección de los empleados en este sentido. Asimismo, es relevante cómo el mencionado Criterio Técnico menciona la cuestión de la desconexión digital. Un punto que abordamos a continuación. 

Desconexión digital y salud laboral 

Como te explicábamos en nuestro artículo sobre el derecho a la desconexión digital, es una de las principales preocupaciones a día de hoy. En parte por el uso extensivo de las nuevas tecnologías y la atención legislativa que acapara este concepto. Se trata de un elemento a trabajar pues si no se respeta adecuadamente podría vulnerar varios derechos. Primero el del respeto a la jornada legal, a la integridad física por los posibles perjuicios a la salud y también el del derecho a la intimidad. 

De hecho el reciente Criterio Técnico 104/2021 de Inspección de Trabajo dedica un epígrafe a la desconexión digital. Y recuerda las varias infracciones a las que podría exponerse una empresa de no garantizarlo plenamente. Un énfasis que es preciso tener en cuenta en todo momento. 

Salud laboral y duración de jornada 

En mayo de 2021, en una nota de la OMS sobre la salud laboral, se alertaba de que las largas jornadas laborales aumentan sustancialmente el peligro de sufrir afecciones cardiovasculares. De hecho, como ya te comentábamos en nuestro artículo sobre las tendencias de jornada laboral post-pandemia, el debate sobre la flexibilidad horaria es uno de los “hot topics” de Recursos Humanos. 

En este sentido, la flexibilidad horaria se ha propuesto no sólo como una respuesta a las transformaciones de las relaciones laborales. También como una manera de mejorar la conciliación laboral y la salud. Opciones como, por ejemplo, el teletrabajo puede ser beneficiosas para mejorar la salud laboral en una empresa. Un elemento que no colisiona con la obligación de realizar el registro de jornada, dado que un software de control horario puede efectuarlo sin dificultades en escenario de teletrabajo. 

Salud laboral y employer branding: una tendencia consolidada 

Existen muchas maneras en que un departamento de Recursos Humanos puede velar por la salud de los trabajadores. E ir más allá de un Plan de Prevención. Incluso estas acciones pueden redundar en la mejora de la imagen de la empresa, tanto interna como externamente. Es decir, a mejorar su employer branding. Estos son los modos en que puede realizarse: 

• –Redefinir el espacio de trabajo: La salud está redefiniendo el espacio de trabajo tradicional. No sólo por la prevención de infecciones sino para mejorar la salud y el bienestar psicológico. Así, cuestiones como la iluminación, el ruido y la distribución de un espacio de trabajo puede mejorar la salud y la motivación del empleado. Te lo explicábamos todo en nuestro artículo sobre el espacio de trabajo como potenciador de la productividad y la captación de talento. 
• –Potenciar la salud en el programa de retribución flexible de la empresa: La salud como beneficio de retribución flexible es muy deseado por los trabajadores. Así lo acredita el informe de Cobee sobre Tendencias en Beneficios para Empleados 2021. Nada más y nada menos que el interés en este tipo de beneficios (como un seguro médico) ha aumentado un 72,84%. Para saber más, te aconsejamos nuestro artículo sobre la remuneración flexible.
• –Invertir en formación: La formación en la empresa está cada vez más valorada por los empleados. Y forma parte esencial de un buen employer branding. En este sentido, es posible dotarles de formación general y específica sobre riesgos para la salud.

En definitiva, la salud laboral es clave para que nuestra empresa funcione bien. Son muchas cosas en juego: el cumplimiento de la ley, la productividad, la satisfacción laboral, entre muchas otras. La noticia positiva es que también existen muchos modos de apostar por ella y fomentarla en nuestra empresa.